Representantes de organizaciones de pequeños productores de diferentes puntos de la provincia se reunieron para analizar y proponer posibles líneas de apoyo a la producción ganadera del sector.
El encuentro se realizó en el predio del Ñú Porá, durante los días miércoles 4 y jueves 5 del corriente y estuvo organizada por la Federación de Organizaciones de Pequeños Productores del Chaco, el Instituto de Cultura Popular y la Subsecretaría de Agricultura Familiar, delegación Chaco.“Somos los principales abastecedores de carne de nuestros pueblos, pero siempre quedamos afuera de los planes ganaderos de los gobiernos”, explicó a este medio Oscar Gamarra, integrante de la Federación. “Nos piden requisitos que muchas veces no podemos cumplir, como título de la tierra, cuestiones impositivas y legales. Además, estos planes no apuntan a resolver los problemas concretos que la gente tiene: infraestructura, agua, sanidad, comercialización”.
Además de los reclamos se compartieron experiencias concretas que aportan soluciones. Tal es el caso de la “Mesa de Sanidad Animal” de Presidencia de La Plaza, donde las organizaciones campesinas junto a las instituciones están avanzando en la erradicación de enfermedades como brucelosis y tuberculosis bovina para lograr una mayor sanidad de sus rodeos. Los productores de Quitilipi y Ciervo Petizo, por su parte, comentaron la construcción comunitaria de reservorios de agua.En el tema “Comercialización” se planteó la necesidad de organizarse para vender en grupo en las diferentes sociedades rurales de cada pueblo. Solicitar a los municipios la habilitación de mataderos rurales de excepción. En cuanto a la “alimentación”: realizar una adecuada planificación de siembra de forraje y solicitar al gobierno apoyo en la implantación de pasturas.
La Federación de Organizaciones de Pequeños Productores del Chaco nuclea a 34 organizaciones que representan a unas 5.000 familias campesinas. Producen animales mayores y menores, para el consumo y la venta en pequeña escala. Venden sus derivados, como leche y quesos, en las ferias locales o a los vecinos del lugar.El ganado mayor ronda las veinte mil cabezas y en cuanto al ganado menor no se cuenta con datos completos. De aquí la necesidad de seguir completando un diagnóstico con datos ciertos que permitan llegar a planes que contemplen su realidad.“Nos queda ahora ponerle números a estas propuestas”, continuó explicando Oscar Gamarra. “Para esto, nos reuniremos en las diferentes mesas de desarrollo territorial. La idea es seguir aportando entre los productores, técnicos y las instituciones ideas y propuestas que nos ayuden a seguir creciendo como productores, como abastecedores de alimentos de nuestros pueblos”, sostuvo.
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